Como no pertenezco a la iglesia católica (me bautizaron pero sin mi consentimiento, y soy muy haragán para hacer trámites que me borren) (espero que me excomulguen) puedo decir sin miedo al infierno que creo que el hombre desciende del mono, como descubrió Charles Darwin luego de estudiar mucho. Aunque estuve leyendo al respecto y me di cuenta que ni siquiera descendemos del mono, sino de una célula que estaba en el agua, que luego fue parásito, luego alga, luego pez, luego un pez que respiraba aire, luego reptil, y así sucesivamente hasta llegar a esto tan complicado que somos.
Al parecer, lo primero que llevó a Darwin a esa idea, fue descubrir (en Brasil) que había dos pájaros exactamente iguales, pero con picos muy diferentes, y se dio cuenta que habían desarrollado distintos picos para procurarse los alimentos que había en las distintas zonas. Esto lo llevó a un estudio muy serio que concluyó con su libro El Origen De Las Especies.
¡Qué loco como evolucionamos en estos cientos de millones de años! Piensen que ahora tenemos un cerebro que, en algunos casos, permite soñar con algo que luego sale en la quiniela (con una tabla mágica que correlaciona los números con lo soñado.) Leí también, que hace miles de años, la pija tenía espinas (imagino que ya no tenemos para no lastimar vaginas o para hacer las delicias de las peteras.) Tenemos un subconsciente también capaz de darnos mensajes increíbles. Tenemos un cuerpo lleno de funciones extraordinarias (basta estudiar cualquiera de los sistemas que lo hacen funcionar), tenemos presentimientos, emociones, alegrías y tristezas. Somos capaces de emocionarnos cuando escuchamos una serie de acordes musicales, y de vomitar cuando escuchamos una canción de arjona. Yo mismo hace más de una semana que estoy muy triste porque alguien me forreó. Me pregunto cuanto me durará la tristeza.
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